Problemas de salud mental en hombre
The story was co-published with Univision 14 Bay Area as part of the 2024 Ethnic Media Collaborative, Healing California.
Los expertos la han calificado como una crisis silenciosa. Una realidad que se esconde detrás de una armadura: de la armadura de ser hombre… Es un hecho que los hombres prefieren no hablar de su salud mental. Pero, ¿sabía usted que casi el 80% de las personas que se suicidan en el mundo son precisamente hombres? Y en EE. UU., la diferencia entre hombres y mujeres que se suicidan aumenta aún más en nuestra comunidad latina. Esta dolorosa cifra, además de mostrarnos una clara y dura realidad, nos lleva a reflexionar sobre cómo en este momento millones de hombres pueden estar batallando contra la ansiedad o la depresión en silencio y en soledad. Un silencio que a veces termina trágicamente con la muerte. Hoy quiero invitarlos a que hablemos de la salud mental de los hombres, sin miedo y sin armaduras.
Nats (Voces de hombres entrevistados al azar en la calle)
Hombre 1: Que hay que trabajar, superarnos, echarle ganas, comprar carro y casa.
Hombre 2: Y lo debes poder hacer sin enseñar mucho tus sentimientos.
Hombre 3: Que tenemos que ser fuertes.
Hombre 4: Que el hombre debe ser hombre, que no puede parar, que no puede llorar.
Hombre 6: Eso es mentira.
Hombre 7: Si lloras, lloramos a solas.
(Las voces se distorsionan y comienza el testimonio de Manuel.)
Sot (Manuel Jasso – Padece ansiedad crónica)
Era una angustia irracional. Yo mismo me decía, pero, Manuel, cálmate. Sentía una gran angustia… Así como que casi quieres llorar, pero tú sabes que eso no va, al menos por eso de que eres el jefe. Esa parte la seguí sosteniendo lo mejor que pude, aunque algunas noches me fue muy mal.
VO
Manuel está haciendo algo que, a ellos, a veces incluso desde muy niños, se les dice que no hagan: hablar de lo que sienten. Y, en su caso, está dando un paso más allá, pues lo está haciendo en televisión y para miles de personas.
Sot
Dayanna: ¿Por qué aceptó concedernos esta entrevista, Manuel?
Manuel: Parte de mi esperanza es que esto le sirva a otras personas. Que los novios de mis hijas lo vean. Mi esposa me dijo: “Lo que tú decidas hacer, ellos lo verán”.
VO
Pero es difícil hacerlo, confiesa. Sobre él no solo recae la expectativa social de lo que implica “ser hombre”, sino que además, al ser latino, debe lidiar con otra palabra simple pero pesada a la vez: la de ser “macho”. Por eso me dice, un poco riendo y un poco nervioso, que claramente su abuelo o su padre no harían lo que él está por hacer, es decir, admitir que eso no está bien y hablar de lo que uno siente.
Sot (Manuel Jasso – Padece ansiedad crónica)
El año pasado se juntaron tres cosas muy importantes: problemas de trabajo, salud y personales. En mi caso, el indicador fue que vivía angustiado todo el día y yo me dije: “Este no soy yo”. Todo empezó a empeorar, hasta que me comenzaron a dar ataques de pánico. No me dejaban trabajar y no podía dormir. Dormía varias horas y me despertaba angustiado.
Dayanna: ¿Qué tipo de sensaciones tenía en el cuerpo?
Manuel: Sentía el corazón muy agitado y tenía una gran angustia. De hecho, en varias ocasiones tuve que salir corriendo alrededor de la casa porque me sentía tan agitado. No podía respirar y el corazón me latía con mucha fuerza.
VO
Lo que describe Manuel lo sufren en la actualidad seis millones de hombres en Estados Unidos, según la Asociación de Ansiedad y Depresión de EE. UU. La mayoría de ellos sufre de ansiedad y depresión. Pero en el caso de los hombres latinos, según el Departamento de Salud y Servicios Humanos, solo 1 de cada 5 hombres recibe ayuda. Por ello, los expertos la denominan “la crisis silenciosa”.
Sot (Julio Monterrey - Psiquiatra)
De los adultos que atiendo, solamente el 30% son hombres.
Bridge Dayanna
Y este silencio muchas veces termina en un grito ensordecedor que tiene un costo desgarrador. Pese a que las mujeres padecen más problemas de salud mental –e incluso se observan más casos de intentos de suicidio– son los hombres quienes más se suicidan. Lo hacen de forma más violenta y, por tanto, más eficaz. Según la Organización Mundial de la Salud, el 80% de los suicidios en el mundo son cometidos por hombres… Y los migrantes latinos que viven en EE. UU. no están exentos a esta terrible cifra.
Sot (Julio Monterrey - Psiquiatra)
Lamentablemente, la mayoría llega con un cuadro clínico ya muy avanzado. A diferencia de la mujer que acude más pronto, el hombre tiende aguantar lo más posible.
VO
Manuel lo soportó durante meses, intentando “ser fuerte”, que era lo que en ese momento le parecía que debía hacer... Hasta que no pudo más y empezó a tener estos pensamientos.
Sot (Manuel Jasso – Paciente con ansiedad crónica)
Yo me acuerdo muy bien de pensar y decir: “Es que yo no puedo sentirme así todos los días por el resto de mi vida, yo no puedo vivir así”… Y ahí es cuando empiezas a pensar... Por eso hay gente que se mata. ¿Quién va a querer vivir así el resto de su vida? Nadie. Imposible, es horrible… Uno lo empieza a pensar no como parte de la solución, pero sí como manera de salir de esa situación. No es la salida, pero es una salida.
VO
Es una salida a la que están recurriendo cada vez más personas. Las últimas cifras a las que se tiene acceso corresponden al 2022. Ese año, en Estados Unidos se registró la cantidad de suicidios más alta de la historia: 49.500 personas se quitaron la vida, según los Centros para la Prevención y el Control de las Enfermedades. Y, como ya hemos señalado, la mayoría eran hombres. Ahora revisemos la situación por edades. Solo entre los hombres jóvenes (de 10 a 24 años) se observó una reducción en la cantidad de suicidios. Aunque según los datos, en todos los demás grupos etarios de hombres la cantidad de suicidios aumentó. Especialmente entre ancianos de 85 o más años. Pero también entre hombres de 45 a 64 años y de 25 a 44 años. Si bien en este último grupo los suicidios crecieron un poco menos, la situación se ha vuelto tan grave que hasta el 2021 el suicidio entre hombres de 25 a 44 años representaba la cuarta causa de muerte. Lamentablemente a partir de 2022, se convirtió en la segunda causa de muerte. Por todo esto, la Organización Mundial de la Salud ha hablado de la importancia de entender los factores del suicidio en relación con el sexo de las personas y, a partir de ahí, analizar sus causas. Además de las experiencias de traumas, abusos y trastornos mentales, la situación económica, la pérdida del empleo, los problemas de salud y las dificultades sentimentales puede exacerbar la salud mental.
Nat (David Lopez – Paciente con depresión)
A veces me despierto gritando.
VO
David perdió su trabajo tras una enfermedad que tuvo como resultado la amputación de una de sus piernas. Está siendo desalojado y hace poco fue agredido por un extraño fuera de su casa. También siente que todo esto se le acumuló y claramente se siente muy afectado.
Sot (David lopez – Paciente con depresión)
Hay cosas que lo bloquean a uno… No se puede prestar atención porque la mente está bloqueada…
VO
Y los hombres latinos inmigrantes e indocumentados están aún más lejos de poder recibir atención. Y es que, si bien la barrera del estigma es poderosa y puede afectar a todos los hombres, hay otros obstáculos que los mantiene alejados de la ayuda.
Sot (Eliseo Pérez Estable - Director del Instituto Nacional de Salud de Minorías y Disparidades de Salud)
Mi nombre es Eliseo Pérez Estable y soy director del Instituto Nacional de Salud de Minorías y Disparidades de Salud.
VO
Las dificultades que tienen los latinos para acceder a servicios de salud se multiplican cuando hablamos de salud mental.
Sot (Eliseo Pérez Estable - Director del Instituto Nacional de Salud de Minorías y Disparidades de Salud)
La atención primaria está cubierta por los seguros, pero muchas veces la cobertura es limitada para las consultas con un psicólogo. Nadie está aceptando pacientes nuevos, incluso en California.
VO
Hasta 600 dólares puede llegar a costar una consulta privada con un psiquiatra, nos dice el doctor Monterrey. Por eso muchos la dejan.
Sot (David López - Depresión)
Si bien tuve una terapia psicológica, pienso que lo espiritual me ayuda más.
VO
Lo siguiente es encontrar un especialista que hable español: la lista de espera es enorme... Pero además de todo esto, a los hombres realmente les cuesta reconocer que les está pasando algo.
Sot (Eliseo Pérez Estable - Director del Instituto Nacional de Salud de Minorías y Disparidades de Salud)
El paciente no viene y dice: “Estoy deprimido”. El paciente dice: “Tengo dolor en el pecho, estoy muy fatigado”. Porque el paciente busca obtener un medicamento, siempre piensa más en el aspecto físico que en lo mental, pero la realidad es que el cerebro está conectado con todo.
VO
Por ello, también los hombres son más propensos a las adicciones.
Sot (Julio Monterrey - Psiquiatra)
Aunque no lo quieran, los hombres buscan el tratamiento y lamentablemente lo encuentran en sustancias, en el alcoholismo, por ejemplo. Por eso, no solo padecen de depresión, sino que también padecen de abuso de sustancias…
VO
Las mujeres también sufren las consecuencias del silencio que ellos guardan, pues esto aumenta el riesgo de violencia en la pareja. Y en el caso de los latinos que viven en Estados Unidos, se suma un factor más: son inmigrantes, un grupo vulnerable, generalmente sin una estabilidad migratoria ni garantía de futuro para la vejez. Por eso, cuando el hombre latino llega a cierta edad y pierde la fuerza física con la que trabaja, corre un riesgo mayor de padecer depresión. ¿Pero qué podemos hacer antes de llegar a este punto si hay pocos especialistas y la atención es costosa?
Sot (Eliseo Pérez Estable - Director del Instituto Nacional de Salud de Minorías y Disparidades de Salud)
La depresión moderada, no aguda, se puede tratar con medicamentos a través del médico de familia.
VO
Eso es parte del futuro esperanzador, pues desde el 2024, los migrantes indocumentados también cuentan con MediCal en California, lo que incluye atención psicológica gratuita. Además, con la aprobación de la Propuesta 1, se prometió más inversión en salud mental y también se esperan mejoras gracias al proyecto de ley sobre salud mental para latinos presentado por el senador Alex Padilla en 2023. Asimismo, existe la línea nacional 988 para la prevención del suicidio, hay varios condados que llevan a cabo medidas para capacitar a terapeutas que hablan español, y también se ofrece ayuda a través de llamadas telefónicas o mensajes de texto.
(Grafico: Collage de sitios que ofrecen ayuda gratuita para problemas de salud mental/// casa sol, cultura y bienestar// clínica la raza/ hayward la familia counseling service / union city tiburcio vásquez health center/ livermore cultura y bienestar/ family paths).
Sot Eliseo
También existen opciones de autoayuda, como buscar actividades placenteras, caminar, ver películas y pasar tiempo con amigos.
VO
Manuel hace todo esto. Lleva un año en terapia con un especialista, hace ejercicio, escucha música, sale a caminar por las mañana y hasta tiene una perrita… Todo lo que haga falta para estar mejor, pero lo esencial, según dice, es hablar.
Sot (Manuel Jasso – Padece ansiedad crónica)
Cuando tienes un problema, piénsalo bien, pero no solo.
VO
Su esposa fue y es su refugio.
Sot
Dayanna: ¿Usted cree que hubiera podido salir solo, sin pedir ayuda?
Manuel: No, no. Yo creo que es imposible salir solo.
Dayanna: Esa angustia que sentía, ¿ya no está?
Manuel: No, ya no está.
Dayanna: Y esos pensamientos, ¿ya no están?
Manuel: No, ya no están.
VO
Visto de otra manera, los datos que hemos compartido hoy nos indican que aunque usted no haya experimentado un problema de salud mental, es altamente probable que algún hombre a su alrededor, un ser querido o un compañero de trabajo esté pasando en este momento por este tipo de experiencia y en silencio. Si bien el suicidio es el indicador más evidente y obvio, según el Instituto Nacional de Salud, casi la mitad (46%) de los latinos en EE. UU. han reportado casos de ansiedad y depresión.
VO
Sot (Julio Monterrey - Psiquiatra)
Muchas personas dicen que los hombres no acuden a las evaluaciones de salud mental porque deben “ser hombres”: no pueden llorar, no pueden sentir tristeza. Quizás deberíamos cambiar la definición de lo que significa “ser un hombre”. Yo pienso que eso es cierto, pero cuando un hombre entra a mi consultorio, si a esa persona yo le digo: “Vamos a cambiar el concepto de ‘ser hombre’”, eso no funciona.
En lo que yo me enfoco es en determinar cómo se siente la persona, qué es lo que lo está molestando, cuál es esa tristeza, esa molestia tan profunda, ese vacío profundo y doloroso. Vamos a trabajar en eso y con el tiempo esa persona sola va a cambiar su concepto de “ser hombre”. Es decir, un hombre padecer una depresión de igual forma como puede padecer una neumonía.
VO
Incluso el ejercicio que realizamos al hablar con hombres al azar por la calle dejó en nosotros un aprendizaje.
Sot
Dayanna: ¿Cuánto tiempo hace que alguien le preguntó cómo se sentía?
Hombre1: Mmm, yo mismo me lo pregunto.
VO
A nosotros nos bastó una silla y una pregunta para que se acabara el silencio.
Sot
Hombre 2: Yo antes tomaba y eso me deprimía. Debido a eso también perdí a mi familia.
Dayanna: ¿No pidió ayuda?
Hombre 2: Pues no, porque no me sentía enfermo.
Hombre 3: No podemos con todo, es muy pesado.
VO
De pronto nos dimos cuenta de que quizá la armadura ya estaba abierta.
Sot
Hombre 4: Es muy importante que los hombres hablen de sus sentimientos.
Hombre 5: Yo he llorado también, no me da vergüenza, he llorado. El alma descansa cuando uno llora.
Hombre 2: No conviene callar porque siempre va a estar ahí. Es mejor sacar todo para afuera, de lo contrario, el nudo siempre va a estar ahí.
VO
Probablemente en medio de esa lucha silenciosa a la que se enfrentan en este momento millones de hombres, un simple gesto de nuestra parte podría ser de gran ayuda: el gesto de escuchar.
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Esto último es muy importante, ya que si bien el suicidio se relaciona con las enfermedades de salud mental, existen otros factores importantes como las crisis que atraviesa el mundo, la pospandemia y demás factores externos. De hecho, más del 50% de las personas que se suicidaron en EE. UU. durante el 2022 no tenían un diagnóstico de enfermedad mental. Por eso hoy, no solo quisimos añadir cifras a este problema que ataca con más fuerza a las personas que evitan hablar de sus emociones; hoy también quisimos agregar rostros. Agradecemos a estos hombres que estuvieron dispuestos a hablar con nosotros ya que han abierto una puerta que durante mucho tiempo se mantuvo cerrada. Están logrando desmitificar la salud mental masculina.